Me encantan los arroces, lo confieso. Esta vez voy a enseñaros cómo preparo uno de los simples, el arroz a la cubana, aunque supongo que muchos de vosotros ya tenéis vuestro propio método.
Como siempre, aquí entran en juego los matices. Cada uno modifica la receta original a su manera. Yo no sé si el plato es cubano o de Murcia, pero vamos, que mi modificación personal está en el tomate. Ahora veréis por qué.
Esta receta también es sencilla. Consiste en hacer por un lado el arroz, y por otro el tomate. Y luego mezclarlo en la misma sartén. Lo único que puede necesitar algo de pericia es freír los huevos.
Se pone agua a calentar, y cuando se ponga a hervir se le añade la sal y el arroz redondo. Cuando digo redondo me refiero a que no uséis basmati. ¿Cuánto tiempo lo dejamos? Bueno, depende de cómo os guste: pastoso, duro, al punto, etc. A mí me gusta al punto, pero como con el arroz blanco no domino de tiempos, voy probando de vez en cuando granos sueltos a ver por dónde va. Cuando esté listo, uso un escurridor y lo dejo secar mientras se hace el tomate.
El tomate lo pongo a freír -después de poner el agua del arroz- en una sartén aparte con un chorrito de aceite. Cuando empiece a hervir, le añado dos cucharaditas de azúcar para eliminar la acidez. Este es mi matiz; la gente utiliza tomate frito, que calienta y añade al arroz. Yo no; éste es el que más me gusta. Lo dejo friéndose alrededor de diez minutos. Cuando está listo, lo pongo en un bol.
Y finalmente, en la misma sartén que el tomate o en una nueva, frío los huevos, uno a uno. Para servir, pongo los huevos fritos en los platos y que cada uno se añada el arroz y el tomate que estime conveniente. A mis hijos les gusta ponerse más tomate que a mí, por ejemplo. Ellos verán.
El único problema de esta receta es que la cocina se queda hecha un desastre. El tomate mancha mucho cuando salpica -usad tapa o estaréis perdidos-; con el huevo pasa lo mismo, y al final parece demasiada suciedad para tan poco sofisticada recompensa. Pero bueno, se hace en menos de media hora y no hace falta casi ningún ingrediente para preparar el plato, así que aceptamos barco.